Glen Schofield, en una entrevista reciente con Danallengaming, reveló su intento de resucitar la franquicia de Dead Space con el equipo de desarrollo original. Sin embargo, EA desestimó la propuesta, citando las prioridades y complejidades actuales de la industria.
Si bien Schofield permaneció con los sabios apretados sobre los detalles de su concepto de Dead Space 4, expresó la preparación de su equipo para volver a visitar el proyecto en caso de reconsiderar. Dead Space 3 concluyó con numerosas preguntas sin respuesta, particularmente sobre el destino de Isaac Clarke, un hilo narrativo maduro para la continuación. Después de su partida de EA, Schofield encabezó el Protocolo Callisto, un sucesor espiritual del espacio muerto. Aunque no coincidió con el triunfo comercial de Dead Space, potencialmente sentó las bases para una futura entrega.
El espacio muerto se centra en Isaac Clarke, un ingeniero varado a bordo del buque minero abandonado, el Ishimura. La tripulación de Ishimura, originalmente encargada de la extracción mineral, emprendió secretamente una misión que los transformó en criaturas grotescas a través de una misteriosa señal cósmica. Aislado y vulnerable en el vacío del espacio, Isaac debe escapar de la Ishimura mientras desentrañando la horrible verdad detrás de la catástrofe.